@OscarCoLatino
Sindicatos de trabajadores aglutinados en la Coordinadora Unitaria Social y Sindical (CUSS) externaron su satisfacción por la reciente beatificación de Monseñor Oscar Arnulfo Romero.
“Como trabajadores parte de la CUSS celebramos muy satisfechos que finalmente se le haya dado el reconocimiento que merece Monseñor Romero, no rx en este caso su beatificación”, expresó Wilfredo Berríos, representante del Frente Social y Sindical Salvadoreño.
Berríos reafirmó que la ceremonia de beatificación es nada más un trámite a seguir por la Iglesia Católica, ya que para los trabajadores y para parte de creyentes “Monseñor Romero ya es Santo por su pueblo”.
La alegría de los trabajadores por el nombramiento como beato se debe a que en su tiempo, Romero defendió los derechos de las clases menos favorecidas, entre ellos los trabajadores agremiados a diferentes sindicatos.
“Como trabajadores organizados mantenemos el perfil de él, porque siempre fue un hombre que luchó por la justicia social, el hombre que en sus homilías pedía justicia social para los más pobres”, aseveró Berríos.
Asimismo, el dirigente sindical lamentó que en el acto oficial de beatificación, la iglesia no tomara en cuenta a diferentes organizaciones que por muchos años lucharon para que el proceso de Monseñor Romero avanzara en el Vaticano.
“No se tomaron en cuenta muchas entidades religiosas que tienen años de estar luchando para que se beatificara a Monseñor Romero. Eso es preocupante porque en esta época ya no deberían de haber expresiones de exclusión”, argumentó Berríos.
Para los trabajadores, los organizadores del evento “hubieran hecho una buena distribución”, con el objetivo de garantizar la presencia de todos los sectores sociales, entre ellos los que denominan “descalzos”, es decir, trabajadores, campesinos y diferentes entidades religiosas.
En cuanto a la posición de líderes de la iglesia católica en España que decidieron no participar en la beatificación por considerarlo como un acto político, los trabajadores consideraron que ese tipo de posturas sí son políticas, porque defienden ideologías, entre ellas el capitalismo.
“Ya no es el momento de estar viviendo esas exclusiones o esos modelos, se supone que democráticamente hablando en la realidad ya no deben de haber esa clase de exclusiones, debe de haber tolerancia para los diferentes sectores, eso es lo que quería Monseñor Romero”, concluyó Berríos.