@JennyCoLatino
Una larga fila de personas llamaba la atención de quienes transitaban cerca de las instalaciones del Ministerio de Trabajo, cialis en San Salvador.
“Quizás van a entregar curriculum”, treat expresó una señora que transitaba por el lugar luego de realizar un trámite en una de las instituciones en el Centro de Gobierno.
Eran más de mil personas, viagra más mujeres que hombres, quienes, en realidad, no buscaban un puesto de trabajo, sino que esperaban su turno para recibir un cheque que por más de un año esperaron.
Este cheque representa la compensación por sus servicios prestados en las plantas: Manufacturas del Rio S.A. de C.V. y Central American Culting Center. CCC S.A de C.V., la cuales cerraron en enero del 2014 de forma sorpresiva, dejando desamparados a sus empleados.
Estas personas ocupaban dentro de dichas empresas cargos como: cortadoras, planeras, raneras, bodegueros, supervisoras y supervisores de producción y calidad, vigilantes, operadores de montacargas, entre otras ocupaciones que desempeñaron, en algunos casos, por más 15 años, pero que en un abrir y cerrar de ojos se quedaron sin el empleo con el que la sostenían sus hogares.
Tras esto, los trabajadores iniciaron su lucha, la cual contó con el acompañamiento del Ministerio de Trabajo (MINTRAB).
De acuerdo a la ministra de Trabajo, Sandra Guevara, quien llegó hasta el lugar de entrega de los cheques, para llegar hasta éste término, se tuvo que atravesar una prolongada y perseverante lucha.
Es de destacar estos empleados producían, a cambio de bajos salarios, piezas de ropa confeccionadas para ser comercializadas en almacenes de gran prestigio en Estados Unidos y países europeos.
En este contexto, la funcionaria explicó que conoció el caso a pocos días de haber tomado el cargo como titular en la cartera, luego que los empleados interpusieron la denuncia correspondiente en la entidad.
Tras esto, se conformó una mesa de negociación, formada por algunos de los trabajadores desempleados, el MINTRAB y representantes de dos de las marcas para quienes producían.
“Con el apoyo de representantes de dos marcas en El Salvador, quienes hicieron sus propias gestiones en las sedes de los Estados Unidos, se logró esto que es como una compensación, algo que se tuvo que hacer en aquel momento pero se logró un año después”, explicó Guevara.
En total, las dos marcas desembolsaron un millón 119 mil dólares para la compensación que se les debía a los más de mil trabajadores.
“Cómo es posible que hayan cerrado. Eso no puede ser, si hay trabajo pendiente”, expresa Gloria Martínez, al recordar que esa fue su reacción al enterarse del cierre de la empresa.
Gloria tiene 40 años y dedicó 14 años de su vida a laborar en Manufacturas del Rio.
Esta mujer de piel morena y figura delgada y que aparenta más edad de la que realmente tiene, comenta que tras quedar desempleada tuvo que dedicarse de lleno a los quehaceres hogareño a cuidar a dos nietos de quienes además es el sostén.
“Hoy sólo estoy en la casa. Ahorita solo mi esposo trabaja en una empresa de cocos allí. Es una empresa solo para hombres, de una transportación que están haciendo de cocos. Me hace falta trabajar, yo, ahorita tengo unos nietecitos que les doy todo, vestuario, comida, todo y es bien difícil no contar con esos ingresos pero ahora con esto que nos dieron algo vamos ha hacer”, menciona Gloria.
De acuerdo con el MINTRAB, los empleados en estas empresas compartían las mismas naves con techos y paredes calientes, sin suficiente ventilación y otras condiciones básicas de seguridad ocupacional; cumplían con una carga laboral fatigosa, puestos de trabajo ergonómicamente inadecuados y un clima laboral poco atractivo; sin embargo, la necesidad de los ingresos económicos hacían que estas personas continuarán laborando pese a todas las limitantes señaladas.
Respecto al cierre de las empresas, la ministra señaló que este pudo deberse a que los trabajadoras y trabajadores de la Sociedad Manufacturas del Rio. S.A de C.V. desde hacía dos meses se encontraban negociando un Contrato Colectivo de Trabajo, sobre el cual las empresas planteaban más obstáculos que posibles soluciones o propuestas.
Esto pudo provocar que las empresas prefirieran cerrar a comprometerse al cumplimiento con de las peticiones y derechos de los trabajadores.
La ministra Guevara destacó que durante los 15 meses, transcurridos a partir del cierre de las empresas, las trabajadoras y trabajadores, con el apoyo permanente del Ministerio de Trabajo se mantuvieron firmes en su justo reclamo para lograr el pago de su salario y pasivo laboral.
En esta línea, el 12 de julio de 2014, este esfuerzo dio como primer resultado el pago del 37 por ciento del monto total adeudado, quedando pendiente el 63 por ciento, cuya reclamación continúa pendiente en un juzgado de lo laboral de San Salvador.
Dicho dinero para completar ese pago puede resultar de la venta de las máquinas y el producto terminado que aún se encuentra en la Zona Franca El Pedregal, el cual no puede ser retirado porque existe un código rojo en la Aduana que evita movimientos para sacar del país esos recursos.
En tanto, los clientes locales de ambas empresas tales como Grupo Miguel, Hanes Brand Inc, HBI y Fruit of the Loom FOTL, en algún momento del proceso han dicho que se pueden responsabilizar únicamente de los montos respaldados, que se encuentra dentro de la planta. “Hay que reconocer la labor de las marcas, pero hay que dejar claro que este es un derecho que está en nuestra legislación”, dijo la funcionaria, quien agregó que este logro es evidencia que el sector sindical tiene fuerza, pues sino se lucha no se tienen este tipo de logros. Agregó que esto es parte de las exigencias, de la reivindicación de los trabajadores organizados.
“Estamos sentando un precedente en el país dando un mensaje de la fuerza y la lucha de la clase trabajadora y los derechos que confiere la legislación laboral”, apuntó.