Fundador
Televisión educativa
En 1967 seguíamos activos en la TV. Educativa. Este año se celebraron elecciones presidenciales y resultó electo el general Fidel Sánchez Hernández. Se rumoreaba cambios en la educación y se mencionaba como ministro de este ramo al licenciado Walter Béneke.
Este año se celebró la Conferencia de Presidentes Latinoamericanos en Punta del Este, viagra Uruguay, a la que asistió Sánchez Hernández. El presidente de Estados Unidos, Lindon B. Johnson, ofreció su cooperación al gobierno de El Salvador para instalar la Televisión Educativa. Esta ayuda consistiría en donación de equipo y asistencia técnica a través de la Agencia Internacional para el Desarrollo (A.I.D.).
Fue sorpresivo este ofrecimiento, puesto que el MINED, desde 1965 venía gestionado la cooperación ante países amigos y organismos internacionales, y nada se había obtenido. La ayuda para la TV Educativa se concretaría el próximo año.
Se consolidó la organización de la Asociación de Maestros ANDES 21 de Junio y definió sus luchas gremiales. A inicios de año había entregado la Secretaría de este Movimiento gremial del departamento de La Unión a la profesora Marta Saravia de Platero, y en mis cátedras de Matemática y de Física del bachillerato, nombraron al profesor Fabio Mejía Fabián, egresado de la Normal Superior y mi coterráneo de Cojutepeque.
Las teleclases modelos que diseñamos ya habían sido aprobadas y se definió que los cuarenta y cinco minutos de la clase en el aula se iban a distribuir en tres períodos. 1. Preparación: 10 minutos que el maestro de aula emplearía para motivar a los alumnos sobre el tema. 2. Recepción: 20 minutos de la teleclase; el maestro de aula observaría la transmisión y las reacciones de sus alumnos. 3. Refuerzo: 15 minutos que emplearía el maestro de aula para desarrollar actividades complementarias.
El doctor Leo Lesch regresó al país a impartir otro curso sobre técnicas de televisión. De este grupo seleccionó como Telemaestros a José Lázaro Canales, Roberto Eugenio Argüello, Antonio Mayorga, Edgar Galileo Flores, y como Realizadores a Rutilio Iraheta Quijano, Benjamín Aldana, Arnoldo Canizalez, Rolando Labrador. También se incorporaron maestros especialistas, entre ellos Soledad Celis de Sosa, Antonia Castaneda de Cordón, Miguel Antonio Martínez, Raúl Andrade Ruiz, Rodolfo Soto Campos, y otros colegas.
El ministro de Educación Walter Béneke iniciaría una Reforma Educativa, y con maestros salvadoreños y asesores nacionales y extranjeros planificó los cambios. Sería una reforma completa, comprendería todos los componentes del sistema educativo.
Llegó 1968 con muchas expectativas. En el país se habían proliferado las escuelas normales, diurnas y nocturnas, urbanas y rurales. Yo fui subdirector de la Escuela Normal Nocturna de La Unión que funcionaba en el grupo escolar José Pantoja. Cada año se aumentaba el número de maestros graduados en el país y las plazas no se creaban en la misma proporción, de modo que se llegó a tener varios miles de maestros desempleados.
Béneke decidió concentrar todas las escuelas normales del país en una sola para lo cual creó la Ciudad Normal Alberto Masferrer, ubicada en San Andrés, cantón Sitio del Niño, jurisdicción de San Juan Opico, en el kilómetro 29 de la carretera Panamericana a Occidente.
Aquí se remodeló un edificio para instalar las unidades de la TV. Educativa: producción, administración y un estudio completo de televisión. Nos trasladamos. Al personal se le proporcionó transporte diario y el almuerzo en Ciudad Normal.
En agosto de 1968 se obtuvieron televisores en préstamo y en algunas aulas de séptimo grado se recibieron las teleclases experimentales de matemáticas y química.
¿Cuál fue nuestra sorpresa? Que la transmisión fue de alta resolución de imagen y calidad pedagógica. Brincamos de contento. Esto confirmó que no andábamos perdidos y nos dio seguridad ante este estupendo hecho pedagógico en los anales de la historia de la educación de EL Salvador. Y fuimos a celebrarlo, no crean que con copas sino con tazas de café sin piquete.