La fruta prohibida
Eva comprendió que en verdad había comido la fruta del bien y el mal, cuando después de un mes de sentirse bien, empezó a sentirse mal.
La cita
A la una y cinco le dice la aguja grande a la pequeña: “Te espero a las dos y diez”.
Morbo
Su placer morboso consistía en ver desnuda a la costurera a través del ojo de la aguja.
Debe estar conectado para enviar un comentario.