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Por Jaafar Ashtiyeh
Yenín/AFP
Tres palestinos murieron este sábado en el campo de refugiados de Yenín durante una operación del ejército israelí para detener a uno de ellos, tadalafil en el incidente más grave en Cisjordania desde principios de año.
La tensión y las recriminaciones entre israelíes y palestinos han aumentado en las últimas semanas, viagra a medida que se acerca la fecha del 29 de abril, cuando debe presentarse un documento clave para fijar las negociaciones de paz.
Según fuentes de las fuerzas de seguridad y médicas palestinas, dos activistas y un civil murieron y otras 14 personas resultaron heridas, dos de ellas gravemente, en los enfrentamientos en el campo de refugiados de Yenín, en el norte de Cisjordania.
Según fuentes palestinas, los soldados israelíes querían detener a Hamza Abu Alheja, de 20 años, un miembro de la rama armada del movimiento islamista Hamas, las Brigadas Ezzedin al-Qassam.
Soldados y militantes se enfrentaron a tiros y «otros hombres armados» acudieron en ayuda del activista, entre ellos Mohammad Abu Zena, de 19 años, miembro de la Yihad Islámica que murió con Alheja, según esas fuentes.
Unas quince mil personas se manifestaron luego exigiendo unidad palestina y clamando venganza contra el ataque.
Con estas muertes el saldo de palestinos muertos en Cisjordania desde principios de año se eleva a nueve, según un saldo de la AFP.
El portavoz del ejército israelí, el teniente coronel Peter Lerner, calificó a Alheja de «bomba de tiempo».
«Estaba implicado en un ataque terrorista en la región y estaba preparando otros ataques contra miembros del ejército y (civiles) israelíes», indicó a la prensa.
El portavoz afirmó que los militares dispararon en respuesta a los tiros del activista, que consiguió herir a dos israelíes mientras intentaba huir del edificio donde se hallaba escondido.
«Otros activistas armados llegaron al mismo tiempo. Los palestinos empezaron a disparar y lanzaron artefactos explosivos (…) y como consecuencia matamos a otros dos», dijo.
El teniente coronel aseguró que la cooperación de seguridad entre Israel y la Autoridad Palestina es constante, pero afirmó que esta operación «era una misión independiente del IDF (ejército israelí) y las fuerzas especiales».
«Dejar actuar a la resistencia»
El ministro israelí de Defensa, Moshé Yaalon, estimó que la operación había «salvado vidas» en la medida en que había permitido «desactivar un ataque terrorista».
El movimiento islamista Hamas, que controla la franja de Gaza, así como la Yihad Islámica denunciaron la operación israelí, pero también acusaron a Fatah, el partido rival del presidente palestino Mahmud Abas, por su cooperación con Israel en materia de seguridad.
Un portavoz de Hamas la calificó de «crimen» que «avergüenza» a la Autoridad Palestina.
«Pedimos a las fuerzas de seguridad (de la Autoridad Palestina) que pongan fin a la coordinación en materia de seguridad con el ocupante israelí y que deje actuar libremente a la resistencia», indicó un portavoz de Hamas, Sami Abu Zohri.
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, que reabrió las negociaciones de paz en julio de 2013, debe presentar de aquí al 29 de abril un «acuerdo-marco» que establezca las grandes líneas de un acuerdo definitivo entre israelíes y palestinos.
