Washington / AFP
El presidente de Estados Unidos Donald Trump, anunció el viernes que su país llegó a un acuerdo con la Unión Europea (UE) sobre las exportaciones de carne, que durante mucho tiempo fueron bloqueadas por las preocupaciones sobre el uso de hormonas por parte de los ganaderos estadounidenses.
«Esta es una gran victoria» para los ganaderos locales, dijo el mandatario, asegurando que «la carne de res estadounidense es la mejor del mundo».
El acuerdo de principio había sido anunciado a mediados de junio cuando funcionarios de la UE, en nombre de los 28 países miembro y Estados Unidos establecieron una cuota mayor para la carne estadounidense de «alta calidad», es decir sin hormonas.
«En el primer año, las exportaciones de carne estadounidense a la Unión Europea libres de impuestos van a aumentar un 46%», dijo Trump en la Casa Blanca. «En siete años van a incrementarse en otro 90%», afirmó.
Finaliza así un conflicto que se remontaba a 1988, cuando Europa prohibió la importación de carne bovina de animales que hubieran recibido hormonas de crecimiento.
En represalia, Estados Unidos impuso en 1999 aranceles a ciertos productos europeos, pero en 2009 levantó sus sanciones a cambio de obtener una cuota de importación para la carne de res extranjera de «alta calidad», incluida la estadounidense.
Pero otros productores como Argentina, Australia y Uruguay se apoderaron de una gran parte de esa cuota, lo que llevó al gobierno del presidente Barack Obama a amenazar a fines de 2016 con la restauración de las sanciones aduaneras.
Para llegar al último acuerdo, los estados miembros de la UE permitieron que la comisión asigne a Estados Unidos mayor parte de la cuota.
Cuando el acuerdo se implemente por completo en siete años, Estados Unidos disfrutará de un contingente de 35.000 toneladas anuales libres de impuestos, con un valor aproximado de 420 millones de dólares.
Actualmente, las exportaciones anuales de Estados Unidos son de unas 13.000 toneladas, según la oficina del Representante de Comercio estadounidense (USTR).
El acuerdo entrará en vigencia en el otoño boreal, tras su aprobación por el Parlamento Europeo, subrayó el USTR.