Tel Aviv/Washington/dpa
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, aún no decide si reconocerá a Jerusalén como capital de Israel, dijo hoy su asesor y yerno Jared Kushner, en medio de especulaciones sobre que un anuncio en ese sentido podría producirse esta semana.
«El presidente tomará su decisión», dijo Kushner en una reunión en Washington del think tank Brookings Institution. «Aún está analizando una serie de datos».
Supuestamente, Trump iba a hacer un anuncio en ese sentido el miércoles en lo que sería un gran alejamiento de lo que fue hasta ahora la política de Estados Unidos en ese tema, tanto en administraciones demócratas como republicanos.
Hasta el momento, Estados Unidos defendía que el status de Jerusalén debía ser decidido por las partes en el marco del proceso de paz entre israelíes y palestinos.
El anuncio de Trump se produciría junto con la finalización del plazo para firmar por dos años más la presencia de la embajada de Estados Unidos en Tel Aviv.
Previamente, la Autoridad Palestina del presidente Mahmud Abbas lanzó una campaña diplomática para evitar que el presidente estadounidense reconozca Jerusalén como capital de Israel.
«Si el Gobierno estadounidense reconoce en un comunicado una Jerusalén unificada como capital de Israel y traslada su embajada a Jerusalén, será un paso que pondrá fin a cualquier oportunidad de un proceso de paz», dijo hoy a dpa Naabil Shaath, asesor de alto rango de Abbas.
En el marco de su iniciativa, Abbas habló por teléfono con los presidentes francés, Emmanuel Macron, y egipcio, Abdel Fattah Al Sisi, con el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani, el jefe de Estado turco, Recep Tayyip Erdogan, y el rey Abdulá II de Jordania, informó la agencia de noticias palestina Wafa.
Según el diario estadounidense «Wall Street Journal», Trump estaría a punto de reconocer Jerusalén como capital de Israel, aunque dejaría para un momento posterior el traslado de la embajada estadounidense de Tel Aviv a esa ciudad.
La comunidad internacional no reconoce Jerusalén como capital de Israel, porque el estatus de la ciudad es una de las cuestiones clave que deben aclararse en las negociaciones de paz entre Israel y los palestinos. Éstos reclaman la parte oriental -ocupada por Israel en 1967 y posteriormente anexionada- como capital de un futuro Estado independiente.
Sin embargo, Israel la considera capital indivisible de su Estado judío.