Por Paul Handley
Washington/AFP
El presidente electo estadounidense Donald Trump negó enérgicamente este miércoles las explosivas informaciones de que la inteligencia rusa había recopilado comprometedora información personal y profesional suya.
«Rusia nunca ha tratado de tener influencias sobre mí. ¡NO TENGO NADA CON RUSIA – NINGÚN ACUERDO, NINGÚN CRÉDITO, NADA DE NADA!», dijo Trump en Twitter,
al reaccionar a las informaciones, no confirmadas, que circulaban en los medios estadounidenses.
Los medios indicaron el martes que los jefes de inteligencia de Estados Unidos dijeron a Trump que agentes rusos afirmaban tener información personal y financiera suya comprometedora, reunida en memorandos que circulan por Washington.
La información fue presentada a Trump el viernes pasado durante un encuentro con los directores de las agencias de espionaje que debían informarle sobre la presunta interferencia rusa de la campaña electoral, indicó la prensa.
«Las agencias de inteligencia nunca deberían haber permitido que esas falsas noticias «se filtraran» al público. Un último disparo contra mí. ¿Estamos viviendo en la Alemania nazi», reaccionó Trump.
La cadena CNN dijo que en esos informes se detallan contactos que personas allegadas a Trump habrían realizado con funcionarios rusos.
También se mencionan grabaciones en video de fiestas con prostitutas de las que el ahora presidente electo habría participado en Rusia en 2013.
«Noticias falsas – ¡una cacería de brujas total!», reaccionó este martes el mandatario electo en Twitter, mientras que el Kremlin afirmó este miércoles que carecía de «informes comprometedores» sobre Trump.
«El Kremlin no tiene informes comprometedores sobre Trump», dijo a la prensa el portavoz del presidente Vladimir Putin, Dimitry Peskov, quien afirmó que esas alegaciones eran una «total falsedad» y sólo pretenden «minar las relaciones bilaterales» entre Washington y Moscú.
Por su parte, el presidente saliente Barack Obama dijo a la cadena NBC que «no comento sobre informaciones clasificadas».
La autenticidad de las 35 páginas de documentos -fechados entre junio y diciembre de 2016- aún no ha sido confirmada por ninguna fuente, pero detallan contactos que habrían realizado enviados de Trump en República Checa y Rusia.
CNN indicó que se supo de la existencia de los memorandos rusos por un exagente de inteligencia británico contratado por otros candidatos presidenciales de Estados Unidos para hacer una «investigación de oposición» política sobre Trump a mediados del año pasado.
El FBI, la policía federal, recibió la información en agosto, más de dos meses antes de las elecciones presidenciales del 8 de noviembre, según CNN.
Las incendiarias revelaciones se producen en vísperas de la asunción del gobierno de Trump, que tendrá lugar el 20 de enero.
También causaron conmoción. «Si estas alegaciones de coordinación entre funcionarios de la campaña de Trump y agentes de inteligencia rusos, y las alegaciones de que los rusos han comprometido la independencia del presidente electo son ciertas, eso sería realmente alarmante», dijo el senador demócrata Chris Coons a CNN.
Las «recientes actividades» de Rusia van en contra de los «intereses estadounidenses», declaró este miércoles Rex Tillerson, nominado por Donald Trump para dirigir el Departamento de Estado, durante su audiencia de confirmación en el Senado.
Piratería
Rusia fue acusada por la inteligencia de Estados Unidos de haber intentado influir en la campaña electoral con ataques informáticos con el fin de aumentar las posibilidades de victoria de Trump.
Según el reporte, Rusia había pirateado los mails del Comité Nacional Demócrata y otras instituciones estadounidenses con el objetivo de incidir en la elección del 8 de noviembre.
Sin embargo, los piratas informáticos rusos no intervinieron en la campaña nacional de Trump, indicó este martes el director del FBI, James Comey.
Según Comey, que compareció frente a la comisión de inteligencia del Senado, los rusos entraron a las computadoras de campaña de Trump en los ámbitos local y estatal, pero no lo hicieron a nivel nacional.
«No tenemos ningún indicio de que la campaña de Trump haya sido pirateada» a nivel nacional, indicó el director del FBI.
Los rusos accedieron a datos del partido Republicano pero se trató de cuentas de correo electrónico «que ya no eran utilizadas», explicó el director del FBI.
Las informaciones que recolectaron eran «viejas» y no fueron difundidas por los rusos, indicó Comey.
El Kremlin rechaza las acusaciones. Pero la administración Obama, que entregará el poder a Donald Trump el 20 de enero, sancionó en diciembre a Rusia expulsando 35 diplomáticos considerados como espías.
Con ese telón de fondo, cinco senadores republicanos y cinco demócratas presentaron este martes un proyecto de ley para imponer nuevas sanciones contra Rusia.
«Deberíamos estar todos alarmados por los ataques rusos contra nuestro país», dijo el senador republicano John McCain a periodistas.
Trump, ha dicho que quiere mejorar las relaciones de Estados Unidos con Rusia, y ha rechazado las acusaciones de que el ataque informático ruso a la campaña demócrata contribuyera a su victoria.
El presidente electo, quien hace tiempo expresó su escepticismo sobre las acusaciones de los servicios de inteligencia de su país, ahora se abstiene de criticarlas de forma directa.