El Tribunal Supremo Electoral (TSE) de El Salvador dio a conocer el acta de escrutinio final de las elecciones presidenciales, en la que se ratifica el triunfo del actual mandatario Nayib Bukele, con el 84.65% de los votos válidos emitidos. Esto, en medio de los cuestionamientos de la oposición sobre la presunta inconstitucionalidad de un nuevo periodo de Bukele y las observaciones de la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre irregularidades en el proceso electoral.
En el acta de escrutinio final, el TSE informó que Bukele obtuvo 2,701,725 votos válidos, equivalentes al 84.65% del total. Mientras que Nuevas Ideas consiguió 3,22,645 sufragios (84.65%). El Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) se ubicó de segundo lugar, con 204,067 votos (6.40%). Le siguió Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) con 177,881 sufragios (5.57%). Los demás contendientes obtuvieron menos del 3% de la votación. En total se registraron 3,191,615 votos válidos de un total de 3,268,466 emitidos.
Popularidad y señalamientos de inconstitucionalidad
Según las principales encuestas de opinión pública previo a los comicios, Bukele contaba con un amplio respaldo ciudadano para buscar la reelección. Según la Cid Gallup, el mandatario tenía un 94% de aprobación. La encuesta de Tresearch le daba un 91.3% de respaldo. Mientras que el Instituto de Opinión Pública de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (IUDOP-UCA) reveló que Bukele tenía un 60.9% de apoyo ciudadano. Por su parte, Nuevas Ideas, el partido oficialista que postuló la candidatura de Bukele, aparecía con un 27.6% de intención de voto.
No obstante la amplia ventaja, partidos de oposición como VAMOS y Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) criticaron la postulación de Bukele a un nuevo periodo presidencial, argumentando que viola la Constitución de la República. El artículo 154 de la Carta Magna establece que el periodo presidencial es de 5 años, sin posibilidad de reelección inmediata. Por lo tanto, alegan que Bukele no puede postularse de forma consecutiva al cargo.
La OEA advierte irregularidades
Por otra parte, la Misión Electoral de Observación de la OEA advirtió una serie de irregularidades durante el proceso electoral salvadoreño. Entre ellas, destaca la falta de control del TSE sobre el escrutinio final, que en muchos casos ha quedado en manos de los representantes de los partidos.
También señalan que no se ha respetado la cantidad de vigilantes por cada fuerza política en las mesas de escrutinio, evidenciando un mayor número de representantes de Nuevas Ideas sobre el resto. Asimismo, la OEA denunció la actitud intimidatoria de representantes de Nuevas Ideas contra observadores internacionales. Incluso, señalan que se obstaculizó el trabajo de una observadora que presenciaba el conteo en una mesa.
El gobierno aún no ha rendido una postura oficial respecto a las observaciones de la OEA. Pero, es válido recordar que el presidente anunció el cierre de la cooperación bilateral entre el país y la OEA desde el año 2021. Bukele denunció la propuesta de su titular, Luis Almagro, por apoyar la postulación del ex-diputado y ex-alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt como representante del país, en razón de que ha sido sometido por la justicia por participar en fraudes electorales desde 2014 y la supuesta retención de hasta $5 millones de dólares de los salarios de la Alcaldía de San Salvador.