Miami/dpa
La última camiseta del Barcelona vestida por el futbolista brasileño Neymar fue a parar a la colección personal del defensa español del Real Madrid Sergio Ramos.
Eso es, al menos, lo que espera el central blanco, que intercambió su camiseta con el astro brasileño del Barcelona, después de que los azulgrana se impusieran por 3-2 al campeón español y de Europa el pasado sábado en Miami, en el primer clásico de la historia disputado en Estados Unidos.
“Cambié la camiseta con él y ojalá sea la última del Barcelona, a nosotros nos quitaría un problema”, confesó Ramos.
“Tengo muy buena relación con él. No sabemos (qué pasará). No me ha dicho nada, no voy a contar intimidades y cada uno es libre de elegir su futuro”, prosiguió el internacional español del Real Madrid, preguntado por el futuro de Neymar.
“Creo que es un grandísimo futbolista y una pieza clave para el Barcelona, y él decide su futuro. Nos quitaría un problema porque en los partidos claves marca las diferencias”, agregó, elogioso.
El clásico de Miami pudo ser el último partido del astro brasileño como azulgrana.
Aunque Neymar mantuvo su silencio, medios internacionales y españoles dan por hecho desde hace días que el aún futbolista del Barcelona jugará la próxima temporada en el Paris Saint Germain (PSG).
El club francés parece dispuesto a pagar los 222 millones de euros (257 millones de dólares) de la cláusula de rescisión del brasileño y a ofrecerle un salario que se acercaría al de su compañero de tridente en el Barcelona Lionel Messi.
Cuestiones fiscales por perfilar se apuntan como el motivo de que el PSG no haya realizado el movimiento aún. Según señalaron algunos medios, el club parisino trata de evitar que los impuestos que debería pagar por su compra eleven el coste del traspaso a 300 millones de euros.
El Barcelona, por su parte, ya manifestó su intención de no rebajar ni un euro el precio del jugador, a quien querría retener.
“Si él quiere irse, sabe que puede pagar e irse a otro equipo. Pero la afición y el club quieren que siga”, afirmó Josep Maria Bartomeu, presidente del Barcelona.
“Tienen que pagar la cláusula, hasta la última peseta. La UEFA tiene controles del ‘fair play’ (financiero) y si algún club se excede, será sancionado”, añadió el máximo mandatario azulgrana, que esta misma semana insistía en que Neymar no estaba en el mercado.
De momento, Neymar, que sigue perteneciendo al Barcelona, viajó hoy a China para cumplir con varios compromisos con patricinadores.
Es posible que, a su regreso, ya lo haga como el fichaje estrella del PSG.