UN AÑO MÁS SIN EL REY DEL POP
Myrna de Escobar
A 11 años de la partida del Rey del Pop, sus seguidores en todo el mundo conmemoran al artista cuyo arte provoca e inspira. El sentimiento de pérdida y tristeza es evidente.
Su fructífera trayectoria musical impactó la cultura y el mercado del entretenimiento con apoteósicas giras y memorables álbumes para el deleite de muchos con un sello incomparable de gracia y energía, capaz de prender el escenario en un instante.
¿Pero… porqué a diferencia de otros grandes artistas de la historia, su música trasciende fronteras y generaciones? La respuesta es una. Su gran compromiso con el arte. Él, al igual que un verdadero poeta, no escatimo esfuerzos por mostrarnos un trabajo cada vez más genuino, auténtico y visceral, que nunca deja de sorprendernos.
En su análisis sobre el trabajo de cantante, el autor del libro Man in the Music, Joseph Vogel, destaca como la característica distintiva del estilo de Jackson es su habilidad de transmitir emoción sin el uso del lenguaje. La música se ve, se siente, se palpa. Un logro que artistas como Ella, Sinatra, Sassy, Ray Charles y Dinah alcanzaron. — en palabras de Quincy Jones.
Con Jackson, la música se ve y se difunde en una amplia gama de sonidos, voces y arpegios que envuelven los sentidos. Su danza es un estamento al desenfreno ocasionado por el ritmo de los instrumentos en el cuerpo del artista. Allí radica su enorme riqueza, por eso gusta a las nuevas generaciones incluso desde antes de aprender a caminar. Jackson era un bailarin de corazón, nato. (Neil McCormick)
Aparte de su logro cultural y más allá de sus ventas, premios y filantropía, él rompió las barreras que típicamente dividían a la humanidad. Creer que sólo los blancos hacen buena música dejo de ser un mito. Prueba de ello es Thriller, el álbum más vendido de la historia de toda la música. Más grande que Elvis, los Beatles, los Stones. Sus canciones llegaron hasta las granjas de Irlanda, hasta la persona que friega los baños en Harlem. “yo quiero alcanzar cada densidad poblacional a través del amor, la alegría y la sencillez de la música” — expresó en su momento el artista. Su arte trascendió hasta el último rincón del planeta.
Jackson era sumamente creativo y versátil, capaz de re-inventarse a sí mismo en cada álbum. Su producción era lo que es el verso para el poeta, — una simbiosis de la realidad objetivo-subjetiva traducida en sentimiento. Con su música él hermanó a los pueblos.
“Michael empezaba oyendo el arreglo completo de los instrumentos en su cabeza, luego tejía la letra. Era un profesional consumado” (Brad Sundberg)
Su música como escape a sus emociones, a su fragilidad humana en perspectiva, le liberó, haciéndole capaz de dar voz a los sin voz, y se expresó con contundencia a favor de los que, como él, sufrían en silencio discriminación, burla y desprecio. Con sus temas logro develar otras emociones tan humanas como la seducción y el engaño (Billie Jean, Dirty Diana, —mi favorita—, Dangerous, Blood on the Dance Floor. El horror, con letras góticas como Ghost, Is it Scary. La injusticia social a través de Leave Me Alone, Why you wanna trip on me, Scream, Tabloid Junkie y They Don´t Care About Us. Ésta última, acompaño las protestas de Minneapolis por la reciente muerte de George Floyd en los Estados Unidos. La soledad estaba presente en letras tan emotivas como: She´s out of my life., Who is it, Stranger in Moscow. We are the World, Man in the Mirror, Heal the World y The Earth Song siempre seran de grata recordación para el público pues denotan su preocupación por los diversos problemas socio- ambientales.
Su creatividad, inigualable como Neverland, el rancho en el cual vivió por más de 17 años diseñado como una fantasía donde recrear la niñez nunca disfrutada por el ejercicio de la música desde los 5 años, le constituyó hasta el final de sus días.
Las palabras no son necesarias, la emoción profunda se comunica a la perfección en cada entrega. “Su voz es la música” (Neil McCormick), crítico musical.
Así como los Beatles hicieron rock con elementos de Folk, Blues Psicodelia, Clásica, Jackson hizo del Pop un género múltiple, infinito en su alcance de sonidos, estilos y posibilidades. Esa fue su filosofía y es el sello de su música y de su arte.
Para quienes se aferran a su legado, la época de la pandemia y la cuarentena mundial ha sido propicia para evocarle en las Redes Sociales. Un grupo de enfermeras de la sala de Emergencias del Hospital Morrison en el Reino Unido consoló su angustia en la pandemia cantando I´ll Be There. Sin lugar a duda, el Covid-19 ya cobra muchas muertes en aquel país como en Italia, México, y Brasil. El éxito, grabado por Michael Jackson bajo el sello de Motown, se dio a conocer en agosto de 1970 cuando el cantante era un adolescente de 11 años. La misma alcanzó la posición número 1 por cinco semanas en América y llegó a ser el sencillo más vendido de Motown. En España, mientras tanto, un joven pianista toca “Heal the World” desde el balcón de su condominio. Los vecinos corean y aplauden la iniciativa en momentos del confinamiento. Stevie Wonder, sin embargo, llora al interpretar The way you make me feel. Otros nos sorprenden con el paso de la luna (Moonwalk) o presumen ante el espejo sus dotes artísticos. Yo, me sorprendí escribiéndole un poema que comparto luego en este documento.
Finalmente, otra característica a destacar es el arrollador carisma del cantante, como lo atestiguan productores, ingenieros asistentes, y compañeros músicos quienes lo describen como una persona con “cierta aura”, pero era humilde y amable. Además de subrayar su gran sentido del humor, curiosidad, pasión y emoción por cada nuevo proyecto. “Todos los álbumes de Michael fueron hechos con un sentido de júbilo que yo nunca he experimentado con otros artistas” recuerda su ingeniero de grabación, Bruce Swedien
“Tenía un increíble vocabulario musical. Desde Showtunes hasta el jazz. Es la única persona en mi vida donde cuando lo vi, mi aparato fonador, enmudeció” (Wyclef Jean) de The Fugees. En boca de sus fans, su legado artístico hace que los ojos vibren de emoción al recordar su sonrisa única y sus exhilarantes presentaciones.
LÁTIDOS
Un grito de asombro
estremeció mi alma
desbordó mi palabra
sorda y rutinaria para
explotar de éxtasis
y como en un acantilado
acompañe esa soledad
tuya embravecida de
mostrarse, acompasada
por tu música.
TRAS LA TORMENTA
La lluvia recia que inundó la noche
desconcentró mi alma soñolienta
y perdida en un festín de frescura
con tu recuerdo bajo mi almohada
me sorprendió el alba destilando
gotitas de ilusión.
UN COLLAR DE RECUERDOS
Me haré un collar con tus recuerdos
Y lo esconderé en la arena
Para ver como al romper las olas
Se escucha tu voz de gitano empedernido.