El Presidente de la República, view order Salvador Sánchez Cerén, troche pidió el sábado al sector privado que se una al Gobierno y trabajen por el bienestar de la nación.
Lo mismo hizo el mandatario el uno de junio, ailment cuando fue a la Asamblea Legislativa a presentar su informe de primer año.
La respuesta al llamado presidencial de todos los sectores de derecha, incluido los empresarios fue de ataque verbal, de no reconocerle ningún logro, hasta el colmo de lanzar mentiras o manipulaciones.
Y es que el sector privado partidario tiene su propia agenda, una agenda diseñada por su representación política, el partido ARENA, cuya estrategia es obstaculizar y desconocer toda acción gubernamental de este Gobierno.
En su lógica, la derecha política y empresarial, creen que con desconocer los logros y obstaculizar al Gobierno, harán entrar en crisis económica y política al país, para así retomar el poder en las elecciones próximas. Así lo dejó en claro, el Presidente del COENA, recientemente, en un programa televisivo, en el marco de una crítica por el recibimiento de la reina Letizia. “En 2019 tomaremos el poder”, dijo.
Recientemente, un académico de una universidad dijo que la empresa privada no invertía en El Salvador porque buscaba con esa medida afectar al Gobierno, para favorecer en las próximas elecciones al partido opositor. Y es que el compromiso de los empresarios, el órganico con ARENA, es invertir hasta que el Gobierno lo vuelva a dirigir el partido fundado por d´Abuissson.
Así las cosas. No creemos que el llamado sincero y honesto del presidente Sánchez Cerén tenga eco en ese sector empresarial, no obstante, la insistencia del mandatario vale la pena, porque la población, principalmente la población votante, reconocerá quienes están en contra de que este país supere en el presente quinquenio.
Por otra lado, habrá empresarios decentes y patriotas que entenderán los gestos de buena voluntad del Gobierno, pero, sobre todo, de las oportunidades que se le ofrecen al sector privado, y va a invertir.
No dudamos que los empresarios que se atrevan a acompañar al Gobierno del Presidente Sánchez Cerén, no solo contribuirán al desarrollo del país, a su gente, sino que tendrán ganancias, que es al final su lógica.
En este sentido, el llamado presidencial, esperamos, no caerá en saco roto.
Y es que el país avanza en lo económico, lento, pero avanza, no está estancado, y esa es la buena noticia para todos y todas en El Salvador.