Por Jamal Al Jabiri/Fawaz Al Haidari
Saná/AFP
Estados Unidos acercó su portaaviones «Roosevelt» a las costas de Yemen, viagra sale and para vigilar a un convoy de barcos iraníes que podría dirigirse hacia este país, sickness donde Arabia Saudita prosigue sus bombardeos contra los rebeldes chiitas.
Este despliegue no anuncia una intervención norteamericana directa -como una intercepción o inspección de barcos iraníes- precisaron responsables estadounidenses.
Al mismo tiempo, treatment la coalición árabe liderada por Arabia Saudita llevó a cabo ataques aéreos contra la capital yemení controlada por los rebeldes, Saná. El lunes, esos bombardeos causaron la muerte de 38 civiles, al ser atacado un depósito de misiles y municiones, lo que generó espectaculares explosiones.
Además, 532 personas resultaron heridas según un balance establecido este martes en cuatro hospitales de la ciudad.
Pero las pérdidas de los rebeldes hutíes no son conocidas, ya que los insurgentes no comunican nunca el número de muertos y heridos en sus filas.
El ministro yemení de Exteriores en el exilio, Ryad Yasin, afirmó sin embargo el lunes que tenía la confirmación de «miles de muertos» entre los rebeldes y sus aliados, militares fieles al expresidente Alí Abdalá Saleh.
Los nuevos bombardeos de la coalición apuntaron el martes por la mañana a posiciones rebeldes en el este, oeste y norte de la capital, según sus habitantes.
También hubo combates durante la noche entre insurgentes y partidarios del presidente Abd Rabo Mansur Hadi -exiliado en Arabia Saudita- en varias ciudades del sur de Yemen, según varias fuentes.
Convoy iraní bajo vigilancia
Entretanto Estados Unidos acercó su portaaviones «Roosevelt» a Yemen y «vigila» a un convoy de barcos iraníes, que podría dirigirse hacia este país.
El convoy, considerado sospechoso, está integrado por «nueve barcos, de ellos dos patrulleras» de tipo militar, dijo a la AFP un alto responsable estadounidense de Defensa.
«Sospechamos que esos navíos transportan armas y equipos militares. Si se entregan en Yemen, ello contribuirá a desestabilizar aún más» el país, indicó otro responsable de Defensa.
Pero éste subrayó que era «prematuro especular» sobre un eventual control de estos barcos por parte de navíos militares estadounidenses.
El coronel Steven Warren, portavoz del Pentágono, consideró «incorrecto» afirmar que los navíos norteamericanos iban a interceptar a los barcos iraníes.
Varias fuentes estadounidenses destacan que en caso de necesidad, ello le correspondería a los países de la región, en primer lugar a Arabia Saudita y Egipto, pilares de la coalición contra los rebeldes hutíes.
«De momento garantizamos la seguridad» de las vías marítimas frente a las costas de Yemen, «no formamos parte de una misión de prohibición» de acercarse al país, dijo otro responsable militar interrogado por la AFP.
El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó el 14 de abril una resolución que impone un embargo sobre armas contra los rebeldes -que controlan varias regiones de Yemen- y les instan a devolver el poder que tomaron en enero.
En total, nueve buques militares estadounidenses se encuentran actualmente en las cercanías de Yemen, «para asegurarse de que las vías marítimas cruciales» de la región «siguen abiertas y están seguras», según la Marina de Estados Unidos.
Washington no participa en los bombardeos de la coalición liderada por Riad, pero contribuye con apoyo de inteligencia y logístico.
Irán, que denuncia los bombardeos de la coalición, no esconde su apoyo a los rebeldes hutíes. Pero Teherán niega cualquier entrega de armas a estos rebeldes que intentan controlar el país.
Varios países han apuntado a Irán como un factor desestabilizador en la región. El ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, denunció el lunes en Beirut la «empresa de desestabilización» de Irán en Yemen, y expresó su apoyo a la coalición árabo-sunita.