Rosmeri Alfaro
@RosmeriAlfaro
Para la candidata a procuradora para la Defensa de los Derechos Humanos, Claudia Melgar Zambrana, el mandato de todo procurador debe estar apegado a la transparencia, legalidad y ser independiente de cualquier funcionario del órgano Ejecutivo.
“El deber del procurador es aportar en todas las violaciones a derechos de las instituciones públicas que no cumplen su mandato conforme a la ley. Se necesita independencia y señalar las cosas que no se están haciendo bien”, expuso la aspirante en una entrevista a Diario Co Latino.
Claudia María Melgar Zambrana ha trabajado en derechos humanos desde 1998, cuando ingresó al Departamento de Derechos Económicos Sociales y Culturales de la PDDH, luego en 2001 inició su trayecto en la Defensoría de los Derechos Universitarios; en el año 2008 fue nombrada como defensora auxiliar y desde 2011 a la fecha se desempeña como titular.
La master en Derechos Humanos y Educación para la Paz afirmó, la PDDH esta pasando una etapa difícil tanto en el aspecto laboral como en la atención de víctimas.
“Una de las primeras cosas a resolver son los problemas laborales para que exista armonía en el interior de la institución, ya que es ahí donde se vela por los derechos de la población. No podemos estar violentándolos, debemos dar el ejemplo en lo que estamos haciendo. Hay que ver las razones internas que han originado ese conflicto laboral y qué posibilidad hay de resolverlos”, dijo.
Melgar Zambrana puntualizó que recuperar la confianza y credibilidad de la institución a través del acompañamiento de las victimas y mejorar el proceso de atención son otras de sus metas.
“Hay demasiada mora en la atención de los casos, hay que reorganizar el área de investigación, el personal que esta cubriendo es muy poco, hay que hacerlo más ágil, acercar las tecnologías a la población para que puedan hacerlo de una manera más fácil”, manifestó.
La candidata a la procuraduría expuso que la transparencia es otro de los aspectos que deben ser promovidos en la institución, aunado a ello una mayor rendición de cuentas para que la población sepa como se esta ejecutando el presupuesto asignado a la entidad.
Asimismo resaltó la importancia de gestionar proyectos internacionales, y crear alianzas con diferentes organismos y la academia para difundir los derechos humanos a nivel nacional. “La idea es que los estudiantes se capaciten en el tema y luego lo promuevan”, comentó.
En cuanto a los despidos de empleados públicos ordenados por el presidente Nayib Bukele desde su toma de posesión, la abogada declaró que es indispensable seguir el debido proceso en materia laboral.
“Hay que respetar las garantías constitucionales, independientemente sea con un objetivo bueno, debe tener el proceso correcto (…) sobre todo cuando se va a suprimir una secretaría completa”, explicó.
“El procurador no debería actuar en razón de intereses de nadie sino en razón de la legalidad. En estos temas ha faltado pronunciamiento y acompañamiento a las victimas. Debe pronunciarse cuando haya violación de derechos porque nada justifica que se haga”, agregó.
Ley de Reconciliación Nacional
En cuanto a la creación de la Ley de Reconciliación Nacional y asistencia a las víctimas del pasado conflicto armado resaltó la importancia de su creación para “cerrar círculos”.
“La procuraduría debería jugar un papel de importante como asesor en los foros consultivos desarrollados por la Asamblea Legislativa, y trabajar con las organizaciones civiles que están viendo por las victimas para que esta vaya apegada a la normativa internacional”, añadió.
El Congreso salvadoreño ha programado cuatro jornadas para la recolección de insumos de parte de víctimas del conflicto armado. La primera contó con la participación de las localidades de Chalatenango, Cuscatlán, Cabañas, San Vicente y La Paz.
“Las victimas no están buscando venganza, están buscando justicia y en ese tema hay muchas maneras de buscar consensos, y una es escuchar a las víctimas como lo esta haciendo el parlamento”, expresó Melgar. A la vez consideró que la ley debe incluir parámetros como la verdad, la justicia, la reparación y la garantía de no repetición.
“Muchas hablan de que no hay que abrir heridas, pero muchas veces las heridas no están cerradas porque las personas no saben donde llevarle una flor a sus familiares, primero se debe conocer lo que pasó. La justicia tiene que ver con ese reconocimiento de la verdad y el perdón”, concluyó Melgar Zambrana, quien busca liderar la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos en los próximos tres años.