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Santiago Leiva
@DiarioCoLatino
La azul cuscatleca sumó un dígito más a su cuota crediticia. La armada de Carlos De los Cobos no mostró su mejor versión, pero le alcanzó un relámpago y su oficio para imponerse 1-0 a la selección de Haití sobre el césped del estadio Robert F. Kennedy, de Washington.
Inicialmente, los discípulos del estratega charro se encontraron con un Haití irreverente. El cuadro caribeño entró “con patada y mordida al cuello” y consiguió asfixiar a los azules, que no encontraban la brújula para salir y les quemaba la pelota.
Ese oscurantismo de los cuscatlecos duró no más de siete minutos. En adelante, llegó la calma y el mejor manejo de pelota de los nacionales que, con desbordes por las bandas, consiguió generar peligro y poner a devengar al meta Johny Placide.
Al ‘20, Gerson Mayén tuvo la mejor ocasión para gritar gol, pero malogró un centro preciso y mandó la pelota a los graderíos. Dos minutos después, Marvin Monterrosa tuvo el chance de anotar, pero su disparo se ahogó en los guantes de Placide.
A esas jugadas les antecedió una incursión por izquierda que terminó en anotación de Óscar Cerén, pero que fue invalidada por fuera de fuego.
Hasta ahí las acciones dan cuenta de un El Salvador en ofensiva, pero lo cierto es que los haitianos también pusieron en aprieto a la zaga cuscatleca, por lo que el portero Henry Hernández tuvo que mostrar sus mejores galas para evitar que el primer acto se cerrara en desventaja.
El 4-1-4-1, diseñado por Carlos De los Cobos, con Iván Mancía y Roberto Carlos Domínguez como centinelas en la zaga, Jonathan Jiménez por izquierda y Bryan Tamacas por derecha tuvieron una lucha cuerpo a cuerpo con los artilleros caribeños para proteger la cabaña de Henry.
Y aún así, el cancerbero de los alacranes tuvo que volar y ensuciarse el suéter para evitar el gol. En el ‘25 intervino en dos ocasiones para ahogar el grito de gol de Carlens Arcus y Frantzdy Pierrot desperdició un gol cantado, justo al cierre del primer periodo.
El complemento arrancó con novedades. Llegó la lluvia al estadio Robert F. Kennedy de Washington DC y también los jugadores de refresco.
De los Cobos optó por aumentar la labor de marca en la zona ancha, colocó a Darwin Cerén para que apoyara la misión de Narciso Castillo y retiró a Moterrosa, que junto a Mayén, Óscar Cerén y Jaime Alas, acompañaba en labor ofensiva a Tony Rugamas, el único punta de lanza de los criollos.
El segundo cartucho quemado fue Santos Ortíz, quien llegó en lugar de Óscar Cerén en el ‘53, pero no hubo chance de ver su actuación en este lapso, ya que la lluvia se tornó eléctrica y el árbitro Oliver Vergara suspendió el encuentro a los ‘56 minutos.
El encuentro se reanudó más de media hora más tarde, después de pasada la amenaza y el respectivo tiempo para que los jugadores realizaran labor de calistenia.
El parón no dejó de enfriar el partido, que transcurrió intrascendente hasta que El Salvador cogió ventaja con el 1-0 en el ‘76.
La anotación llegó después de una pifia en la zaga haitiana que fue bien aprovechada por el galope de Juan Carlos Portillo (llegó por Alas), que tras ganar la línea de fondo centralizó justo para Rugamas, quien colocó perfecto el pie y mandó la pelota al fondo de la red.
Justo al cierre de los 90 minutos, Rugamas tuvo una nueva oportunidad, después de un centro de Ortíz, que generó varios desbordes por derecha.
Este es el penúltimo partido de la selecta antes de participar en Copa Oro. Su último test será la selección de Japón, el próximo domingo.
Cabe destacar que esta es la quinta victoria de la Azul en sus últimas cinco presentaciones. A Haití también se le ganó con igual marcador en noviembre pasado.
