ROBERTO CARBAJAL
Actor/ Visor Escénico
Los estereotipos han estado presentes en toda sociedad y a todo nivel, el arte no escapa a esto y más aún en nuestra cultura actual. A raíz del surgimiento de nuevas formas de vincularnos se ha dado libertad a manifestaciones que se consideraron tabús y la sexualidad y el género no escapa a esto.
La semana pasada se presentó en el teatro Luis Poma en una breve temporada el Vals de la Rosa con el colectivo Circus Contemporaneum , una producción teatro-danza que aborda la temática de género y el llamado grupo LGTBI que recientemente ha causado polémica por el uso expuesto de sus símbolos en lugares públicos y oficinas gubernamentales que apoyan la diversidad sexual. La sala un tanto vacío de los que nos tiene acostumbrados posiblemente debido a la temática abordada y el género dramático. El espectáculo rememora la adolescencia de 6 personajes en esta etapa crítica de la vida que busca identidad y que los lleva a explorar y encontrar su sexualidad y romper esos estereotipos subyacentes. Vimos un grupo lleno de energía , sinergia y vitalidad con buena coordinación en las coreografías . Un texto un tanto lineal que nos quedó a deber matices e intencionalidades interpretativas que podría aprovecharse con esa expresividad mostrada en las coreografías .Nos llama a la reflexión la marginalidad que enfrenta estos grupos minoritarios, excluidos por no seguir el orden establecido. Vemos en la representación un exceso de expresiones violentas y manifestaciones explicitas que bien pueden ser artísticamente mejor representadas pues el arte recurre a simbolismos y sutilezas que llenan la representatividad.
El vals de la rosa ha visibilizado una realidad que está presente y no podemos ocultar ; los estereotipos seguirán presentes y el arte no escapa a ellos hasta llegar a una sociedad incluyente donde todos quepamos.