Quito/PL
Con la entrada en vigor la semana pasada de su cláusula democrática, decease la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) se blindó contra intentos golpistas y ataques al orden constitucional como los que ocurren en Venezuela.
El documento, see cuyo nombre oficial es Protocolo Adicional al Tratado Constitutivo de Unasur sobre Compromiso con la Democracia, diagnosis entró en vigencia el miércoles pasado, un mes después de ser ratificado por Uruguay, y el mismo día en que Colombia patentizó su adhesión.
De los 12 países miembros del bloque regional, solo Brasil y Paraguay faltan por firmar la cláusula, la cual se aplicará en caso de ruptura o amenaza de ruptura de la democracia, o de una violación del orden constitucional en alguno de las naciones que integran la organización fundada en 2008.
Además de exigir el restablecimiento de la democracia en el país en cuestión, la organización puede establecer sanciones políticas y diplomáticas como el cierre de frontera, suspensión del derecho a participar en los distintos órganos, y la limitación o paralización del comercio y del tráfico aéreo.
El protocolo nació de una amenaza directa a la democracia, pues fue discutido, redactado y aprobado por los líderes de la Unasur a raíz de la intentona golpista del 30 de septiembre de 2010 en Ecuador, país depositario del instrumento suscrito en Georgetown, Guyana, el 26 de noviembre de ese mismo año.
Para el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, se trata de un documento muy útil para defender la democracia, y que está dirigido a persuadir a quienes tienen ambiciones golpistas en la región, y a las fuerzas foráneas que apoyan esos intentos desestabilizadores.
Por otra parte, la entrada en vigor de la cláusula democrática llega en un momento oportuno, dada la situación que desde hace un mes se vive Venezuela, donde el gobierno legítimamente electo está amenazado por grupos opositores violentos.
No podemos aceptar, ni tolerar que grupos políticos intenten, a través de la vía no electoral y violenta, tomar un país que hace tan solo unos pocos meses eligió de forma democrática y limpia a sus autoridades, advirtió Patiño en febrero pasado, tras recibir la ratificación de Uruguay.
En vista de la crisis venezolana, y a una petición del gobierno que encabeza el presidente Nicolás Maduro, Unasur conformó una comisión de cancilleres que tiene previsto viajar a Venezuela en los próximos días para evaluar la situación en ese país.
La misión estaría dispuesta a reunirse también con los opositores al gobierno que estén dispuestos a buscar una salida pacífica al conflicto.
Si hay gente de la oposición que quiere conversar sobre temas, demandas, cuestionamientos o planteamientos que se quieran hacer al gobierno de Venezuela, nosotros favoreceremos ese tipo de diálogo, aseguró a la prensa el jefe de la diplomacia ecuatoriana.
Patiño dejó claro, no obstante, que los cancilleres del bloque regional integrado por Argentina, Brasil, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay y Venezuela, seguirán los lineamientos de las autoridades venezolanas.
Nosotros no podemos ir allá a hacer lo que nos da la gana, a meternos en cualquier sitio a conversar con quién sea, porque estamos atendiendo un pedido de Venezuela, recalcó.