@OscarCoLatino
Estudiantes de la Universidad de El Salvador (UES) agremiados en la Coordinadora Universitaria por un Presupuesto Justo, exigieron que se incremente el financiamiento otorgado por el Estado al único centro público de estudios superiores del país.
“Como estudiantes de la Universidad de El Salvador estamos exigiendo el 8 % del Presupuesto General de la Nación de manera inmediata, no de manera escalonada”, dijo Rocío Flores, representante de la Coordinadora.
De igual forma, la estudiantes universitaria aseveró que el porcentaje del Presupuesto General de la Nación, que es asignado a la UES es “una burla”, ya que con ello no se solventan las necesidades de la comunidad universitaria.
“La universidad es la más precaria de la región centroamericana, no tiene suficiente financiamiento, es la única que tiene una demanda de más de 30 mil bachilleres cada año, de esos solo ingresa entre 7 mil y 10 mil, ¿dónde queda tanto joven sin educación?”, cuestionó la representante de la Coordinadora.
Asimismo, los miembros de la Coordinadora pidieron que el gobierno cese el financiamiento a proyectos ejecutados por universidades privadas, ya que consideran que éstas no tienen necesidad de recibir fondos estatales porque cobran elevadas cuotas a sus estudiantes.
“La UES, que es la única (universidad) pública, no está siendo financiada. La UCA tiene más de $2.8 millones de financiamiento del gobierno, las privadas tienen mayores ingresos porque son de las más caras”, afirmó Flores.
La representante de la Coordinadora agregó que universidades privadas reciben fondos para desarrollar programas de emprendedurismo, tecnificación o similares, sin embargo, aseguró que los mismos pueden ser ejecutados por la UES beneficiando a jóvenes hijos de obreros y empleados.
“Están haciendo de la educación un mercado, un lucro, estamos en contra de que la educación sea una mercancía, porque es un derecho de la clase trabajadora”, aseguró Flores.
Los estudiantes universitarios fueron acompañados por miembros de sindicatos que externaron su rechazo a supuestas medidas propuestas por el Fondo Monetario Internacional. Sindicalistas sostienen que con esas medidas se reducirán los subsidios, principalmente el gas, agua, energía eléctrica y transporte.