Natal/Brasil/dpa
Uruguay se clasificó hoy a los octavos de final del Mundial de fútbol de Brasil al ganar con un gol en el minuto 80 de Diego Godín a una Italia que jugó media hora en inferioridad por la cuestionada expulsión de Claudio Marchisio y que queda eliminada con la derrota.
Uruguay se enfrentará en octavos con el líder del Grupo C gracias al salvador tanto del defensa Godín tras el lanzamiento de un córner en la recta final de un partido tenso y polémico. Italia, no rx salve subcampeona de Europa, cialis se despide por segundo Mundial consecutivo en la primera ronda.
Ambos llegaron a la última jornada del Grupo D igualados con tres puntos, pero Italia tenía mejor diferencia de goles, por lo que le bastaba el empate para acceder a octavos junto a Costa Rica. Uruguay necesitaba ganar para mantener el sueño de otro «Maracanazo» el 13 de julio. Sigue vivo.
No hacía falta que los protagonistas calificaran el partido de final. Lo era. Y como tal se jugó, un duelo táctico en el que ambos entrenadores usaron el mismo sistema de tres defensas con dos hombres abiertos por las bandas.
Cesare Prandelli, el técnico italiano, empleó por segunda vez desde que es seleccionador a la defensa de la Juventus con Andrea Barzagli, Leonardo Bonucci y Giorgio Chiellini para proteger al arquero Gianluigi Buffon, también «bianconero».
En tiempos de necesidad, mejor recurrir a lo conocido, con Andrea Pirlo y Marchisio en el mediocampo, un esquema con probado éxito en Turín. La Juventus ha ganado así los tres últimos títulos en Italia con el técnico Antonio Conte.
Italia quería protegerse atrás ante Luis Suárez y Edinson Cavani, calificada por Prandelli como «la mejor pareja de ataque del Mundial».
La «Azzurra» quiso y tuvo el control de la pelota con la consigna de no arriesgar para no provocar un contragolpe de Uruguay, bien parado en la cancha con el mismo esquema 3-5-2, pero sin fútbol y con dificultades para hacerle llegar la pelota arriba a Cavani y Suárez.
También Italia buscó la pelota larga para su novedoso dúo de ataque: a Mario Balotelli se le sumó Ciro Immobile.
En el minuto 11, Pirlo, de falta, probó a Fernando Muslera, primera semiocasión de un partido trabado, con tensión y de ritmo bajo, como corresponde a un encuentro en el que sólo podía quedar uno. Uruguay, que necesitaba ganar, no iba a buscar desesperadamente el gol desde el inicio. Ya habría tiempo.
Italia controlaba el partido con un Marco Verrati omnipresente, elegante en la conducción, clarividente en el pase y esforzado en la recuperación, lo que le valió los aplausos de Prandelli desde la banda. Cuando Pirlo, de 35 años, se retire de la selección tras el Mundial, el sustituto será el menudo jugador del Paris Saint-Germain, que completó el 100 por ciento de sus 31 pases en la primera mitad.
Uruguay encontró una vía de acceso al arco de Buffon con un par de llegadas de Alvaro Pereira desde la izquierda.
En el minuto 22, Balotelli vio la tarjeta amarilla por juego peligroso, lo que condicionó ya su trabajo y le costó la suspensión para octavos. Prandelli lo sustituyó al descanso por el mediocampista Marco Parolo.
Uruguay no necesita mucho para crear peligro una vez que llega a las inmediaciones del área. Y creó la mejor ocasión del primer tiempo. Una pared entre Suárez y Nicolás Lodeiro en el minutos 32 obligó a una doble intervención de Buffon.
El conjunto sudamericano estiró líneas en la segunda mitad, y en el minuto 58 Cristian Rodríguez tuvo una gran ocasión, pero su disparo cruzado ante Buffon se marchó cruzado.
Un minuto después llegó la polémica expulsión de Marchisio tras una infración sobre Egidio Arévalo. Italia debía defender ahora el empate con un hombre menos durante media hora.
Uruguay se fue entonces por el triunfo. El técnico, Oscar Tabárez, suplió a Álvaro Pereira por el delantero Cristhian Stuani y cambió a defensa de cuatro.
En el 65, Buffon salvó el gol de Suárez con una mano, abajo milagrosa. ¿Resistiría Italia? ¿Acertaría Uruguay? La «Celeste», hoy de blanco en Natal, mostró sus problemas para generar fútbol.
La tensión subió, Chiellini y Suárez se desafiaban y se reclamaba cualquier acción en el área. En el 80, en un córner desde la derecha, llegó el tanto de Godín, más con la espalda que con la cabeza, que dio el triunfo a Uruguay. Italia ya no fue capaz de reaccionar en inferioridad, sin delanteros y sin más cambios.