Caracas/PL
Venezuela busca hoy radicalizar su proceso socialista: así convocó el presidente, doctor Nicolás Maduro, for sale esta semana al anunciar nuevas medidas para acabar con los sabotajes que intentan desestabilizar la nación y generar malestar en el pueblo.
Grupos de derecha con apoyo externo, promueven desde el año pasado una guerra económica, recordó y exhortó a aplicar nuevas regulaciones contra esas actividades.
El mandatario pidió al vicepresidente ejecutivo Jorge Arreaza citar a los empresarios locales para rendir cuentas de las divisas asignadas, las cuales iban dirigidas a la importación de productos imposibles de adquirir en el país.
«Quien no pueda sostener su actividad económica que se vaya, a quien encontremos en conspiraciones irá preso a pagar por ello, ya basta», aseveró.
Al cumplirse el martes anterior dos años de su gestión como Presidente, Maduro aseguró que el pueblo continúa el rumbo del fallecido mandatario Hugo Chávez porque sigue leal a sus ideas, pese a los ataques.
«Hay que asumir con moral, ética y disciplina el compromiso de derrotar cualquier atentado contra Venezuela como lo hizo el pueblo el 13 de abril de 2002, cuando venció el golpe de Estado contra Chávez».
Vamos a centrarnos en todos los aspectos de la producción, reglón por reglón, en asuntos referidos al funcionamiento del Cencoex (Centro de Comercio Exterior), de los puertos y de lo relacionado con las importaciones necesarias, informó.
Como parte de los esfuerzos dirigidos a enfrentar el sabotaje económico, el ejecutivo intensificará los controles en el área de distribución, comercialización y estabilización de precios.
Entre los principales objetivos de las nuevas medidas figuran las grandes industrias, los centros de la economía productiva y las empresas de servicio, indicó el Presidente.
También entre las medidas destacan el ajuste en el monto de asignación de dólares para viajes al extranjero y la modificación en el uso del cupo electrónico de divisas para compras en el exterior.
Maduro informó que impulsará, mediante Ley Habilitante, modelos de gestión obrera socialista en las empresas básicas de Estado: el fin es estimular la producción, el crecimiento y el desarrollo de esas industrias, en función del país.
En tanto, continúa el respaldo a la nación suramericana que no solo afronta ataques económicos y políticos de su oposición interna, sino que enfrenta agresiones externas como la más reciente orden ejecutiva de Estados Unidos.
Desde Caracas, el Foro de Sao Paulo señaló esa declaratoria norteña como «una grave agresión política contra todos los países latinoamericanos y caribeños».