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Una vez más la República Bolivariana de Venezuela es sometida a una nueva acción desestabilizadora de parte de la derecha oligárquica criolla y la derecha internacional, view promovida, viagra sin lugar a dudas por el imperio.
El Gobierno de Nicolás Maduro, Presidente Constitucional, no solo ha desbaratado un nuevo plan golpista, conocido como “Operación Jericó”, sin que ha dejado al descubierto quienes están detrás de los desmanes y acciones antidemocráticas.
Las acciones violentas de esos pequeños grupos pro imperiales y antichavistas, iniciados el 12 de febrero, están vinculados con una estrategia de desestabilización puesta en marcha en la misma fecha del año pasado, cuando, las turbas contrarrevolucionarias mataron a cerca de un centenar de venezolanos y venezolanas, cuando se inició la primera fase de la “Operación Jericó”.
Uno de los impulsores de esos actos violentos que terminaron con la vida de venezolanos está en la cárcel, y hoy es la justificación de la ultraderecha venezolana para reanudar, siguiendo la estrategia golpista, los desórdenes en la capital de la patria de Bolívar y otras ciudades.
No dudamos que el Gobierno y el pueblo venezolano derrotará cuantas intentonas golpista se fragüen bien en territorio venezolano, o fuera de sus fronteras.
No obstante, es necesario que los pueblos de América Latina y del resto del mundo que esgrimen la bandera de la democracia deben pronunciarse a favor del Gobierno legítimo de Venezuela. De la revolución chavista en marcha, con la que se le está devolviendo la soberanía a los y las venezolanas, cuando ha nacionalizado la explotación y venta de petróleo; cuando le da salud y educación al pueblo; cuando entrega viviendas a los más necesitados producto de las utilidades de la venta del petróleo y cuando ha destinado en lo social, el 62.5 por ciento del ingreso público para la erradicación de la pobreza y el hambre.
La derecha violenta venezolana no podrá nunca más, utilizar la institucionalidad armada contra un Gobierno legítimo en Venezuela, porque su formación es socialista y revolucionaria. Y ha sido gracias a esta atinada formación de los nuevos militares venezolanos, ya que jóvenes oficiales develaron el plan golpista, que iba a ser ejecutado por oficial traidor de la Fuerza Aérea.
Venezuela no está sola, de ahí que esa solidaridad debe demostrarse, de forma militante, día tras día, semana tras semana, mes tras mes, hasta que toda América Latina reciba los frutos de un modelo socialista a lo latinoamericano.
