Por: Rolando Alvarenga
En un país en el que los medios de información están revelando diariamente sonados escándalos a todo nivel que marcarán el antes y el después de nuestra historia socio-política, el Comité Olímpico de El Salvador (COES) se da el lujo de vetar periodistas para que no asistan a sus “conferencias íntimas”, donde hay mucha tela que cortar.
Y es que, en otra muestra de abuso de atribución, este Comité Olímpico dejó a este servidor, y tengo entendido a otros colegas de infortunio, fuera de la convocatoria para la conferencia sobre la participación salvadoreña en los Juegos Olímpicos Río 2016. Raro, porque cuando yo laboraba para La Prensa, hasta me llamaban para confirmar mi asistencia. ¿Por qué será?, me pregunto, pero sin entrar en pesadillas.
Lo que sí tengo claro es que vetar a personal de medios de información no es un derecho que le asiste a este Comité, porque el deporte olímpico salvadoreño es un patrimonio de país y no es un bien privado.
En consecuencia, este viene a ser otro clavo al ataúd de la “mordaza olímpica” que es justamente una de las razones del porqué tenemos la chulada de deporte olímpico que tenemos. Cerrarse a la prensa en un país que se está abriendo a la transparencia integral es indigerible y hay que denunciarlo y sentir vergüenza por este Comité.
Con respecto a la presentación del esperado informe, tengo entendido a través de dos que tres miembros de mi “Team-Sabuesos”, que en esta íntima tertulia no salieron a relucir cuestionamientos vitales sobre la participación en Río. El desempeño de los cuatro mejor posicionados se calificó de “actuación histórica”, pero no se abordó, honestamente, las causas del derrumbe de los otros cuatro. ¡Y podemos debatirlo ante la prensa!
Esto volvió a desnudar la fea práctica y política de este Comité, de informar las cosas que quiere que se digan, sin tener la solvencia integral para responder a los señalamientos serios, objetivos, responsables y profesionales sobre la pura verdad. En este aspecto, el Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador (INDES) es puesto periodísticamente contra las cuerdas y siempre invita a sus conferencias.
Mis preguntas
Presente o vetado, yo no me quedo con las ganas de revelar las interrogantes que tenía en agenda para esta emocionante conferencia: ¿por qué si algunos directivos de este Comité no aparecen en los eventos de los diversos deportes, sí aparecieron en el desfile en Río? ¿Qué hacía gente extraña en nuestro contigente en Río, incluso, en la Villa? ¿Por qué este Comité no ha llevado durante los últimos juegos a un periodista salvadoreño?
Además, ¿tiene este Comité la atribución de pasar sobre las autonomías federativas y disponer de sus atletas? ¿Por qué este Comité ha perdido ayuda económica del INDES y patrocinadores? ¿Están dispuestos a abrir sus cuentas ante la Corte de Cuentas? Y, dado que se percibe cierto clima de irritación contra esta dirigencia olímpica, ¿están pensando seguir en estos cargos? ¿Darán un paso al costado o esperarán ser víctimas del voto de castigo?