TeleSUR
La vicepresidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, aseguró este martes que su decisión de no aparecer como candidata en las elecciones de 2003 no es “renunciamiento”, sino el resultado de una campaña para proscribir políticamente a ella y al peronismo.
«No es ni renunciamiento ni autoexclusión, es proscripción», afirmó Fernández de Kirchner en la inauguración del Polideportivo Municipal Diego Armando Maradona en Villa Corina, en la localidad de Avellaneda, en la periferia sur de Buenos Aires.
La exmandataria argentina (2007-2015) señaló que la campaña en su contra, que atribuyó al “partido judicial”, no es algo nuevo.
“Este procedimiento de proscripción no es nuevo, lo empezaron a pergeñar al día siguiente del 9 de diciembre que nos despedimos en la Plaza y cantaban ‘Volveremos’”, mencionó al referirse al día en que concluyó su mandato presidencial en el año 2015.
Esta fue su primera aparición pública desde el pasado 6 de diciembre, cuando un tribunal oral la condenó a seis años de prisión y a la inhabilitación para ocupar cargos públicos, en un proceso que duró más de tres años y estuvo rodeado de varios escándalos por parcialidad manifiesta contra Fernández de Kirchner. El fallo está en apelación.
“No hice un renunciamiento. Anuncié que yo no iba a someter a la fuerza política nuestra a llevar de candidata a alguien que le dijeran ‘está condenada’ y, de esta manera, ser absolutamente funcional a lo de ellos. Esto no es contra mí, es contra el peronismo”, expresó la vicemandataria.
Llamó a los dirigentes y militantes del oficialista Frente de Todos a hacer política con la gente.