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Panamá / Prensa Latina
Un vuelo humanitario partió el jueves desde el aeropuerto internacional de Tocumen, en esta capital, rumbo a La Habana, Cuba, con 40 pasajeros a bordo que quedaron varados aquí por el cierre de las fronteras.
La terminal aérea informó que Copa Airlines hizo el tránsito que partió en la mañana desde Panamá, y aunque no definió las nacionalidades de los pasajeros, precisó que siguieron todos los protocolos de seguridad sanitaria impuestos por las autoridades panameñas, la compañía aérea y las medidas internacionales para contrarrestar el contagio del Covid-19.
Hasta inicios de abril, la aerolínea transportó a dos mil 300 pasajeros varados fuera de sus países y anunció su presidente ejecutivo, Pedro Heilbron, que ‘seguiremos haciendo nuestro mayor esfuerzo por conseguir más permisos de las autoridades’, al tiempo que agradeció a los gobiernos la apertura de sus espacios aéreos y aeropuertos para la repatriación de sus ciudadanos.
Según Copa Holding, sus empresas trabajan por localizar a los viajeros interesados en retornar a sus países de residencia para incorporarlos a los vuelos humanitarios o en otras aerolíneas, a lo que respondieron positivamente un tercio de quienes se les canceló la reservación en su momento.
La aerolínea panameña anunció que ‘espera retomar sus operaciones’ regulares el venidero primero de junio, a partir de la apertura del espacio aéreo panameño el próximo 23 de mayo, lo que anunció el gobierno.
Esto se conoció a través de la resolución emitida por la Autoridad de Aeronáutica Civil (AAC) de Panamá sobre la prórroga por 30 días para permitir vuelos comerciales y generales, mientras que el anterior plazo vencía ayer, por lo que compañía debe esperar los permisos de las autoridades de los demás países de la región para retomar sus itinerarios.
En una nota distribuida a la prensa, Copa definió que paulatinamente restablecerá rutas cuyo alcance pronostica que sea una décima parte de las operaciones de su flota antes del impacto de la pandemia de Covid-19, que obligó a estacionar su flota en el aeropuerto internacional de Tocumen.
Este bajo nivel de vuelos responde a una demanda de pasajeros muy baja en el corto y mediano plazo, alto nivel de cancelaciones de reservas y a que la mayoría de los países de la región mantienen restricciones operativas o de ingreso a su territorio, señaló el texto.
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