El pájaro se posó en los cables del tendido eléctrico, yo estaba parado frente a la universidad tecnológica ¡me miro!, le miré! Levantó su colita y defecó con un aire y continente tal como si me hubiese querido decir algo.
¡Mírame! soy libre y no estoy sujeto a horarios ni marco tarjeta de entrada ni de salida y abro mis alas al viento, y el sol me acaricia con sus dorados rayos en cálidos amaneceres de luz y amor.
De pronto percibí que con el pensamiento me preguntaba ¿y tú qué haces?.
A lo que respondí soy amante de la poesía me dedico a la contemplación, las ventas y la lectura, sabes le dije tengo un amigo que es escritor y dirige la página literaria del suplemento cultural 3000 y comprende y entiende a los artistas, en especial a los poetas pues él es poeta y de los buenos.
De repente el pajarito por un momento meditó, luego dijo te refieres a Mauricio Vallejo ¡sí, a él me refiero! Conteste, luego dijo:
Si le conozco por sus bellos escritos, además un día me llevó a navegar en ese mar que ha sido surcado por tantos navegantes mar embravecido creo que era el mediterráneo, y por poquito me ahogo pues estaba leyendo sus bellos poemas de BITÁCORA.
Dile que le estimo muchísimo y extendió sus alitas y voló, voló, voló me quede mirando como desaparecía en el espacio, empecé a caminar por la calle arce hacia abajo dos lagrimas rodaron por mis mejillas.
CARLOS ANDRÉS VILLACORTA