Paco el remesero
No entiendo, como va creer que yo le voy a morder la mano al chele ese, hubiera sido la Clinton con todo besito, pero no ese maishtro que me lo imagino hediondo a rancio o mas bien no entiendo a quien se le ocurre eso de que los remeseros, le vamos a morder la mano si bien sabe toda la gente que es difícil acercársele, ni la mujer pues, que de lejitos la anda, nada que ver con el Obama y su esposa, si, de verdad, no entiendo porque dijo eso.
Chepe el remesero
Para que le voy a dar paja, yo desde que llegue a la USA comencé a echar riata no como negro, sino que como chucho aguacatero y no fue fácil, trabajé con ganas, con la única ilusión que no dijeran que el único salvadoreño güevón era yo, porque en la USA se vuela lomo de lo que caiga si uno quiere mandar centavitos a la family, y que me salgan con que le mordí a la mano a no se quién ¡si que da cólera! porque yo no llego a eso ¿a quien se le ocurre?
Juan el remesero
Bueno, a mi me parece que la novatada es la que hace hablar de más a funcionarios que ni siquiera han entrado. Si usted le pone coco montón de gente mojada que estamos en los yunaited, y la migra nos acosa como que fuéramos yihadistas o islamitas o sea como enemigos públicos, cuando nos agarra nos pega unas taleguiadas y a la mayoría nos bajan los dientes y así cholcos seguimos de tercos, porque nos echan y nos regresamos. Solo puré de papas y verduritas comemos, así que ¿cómo le vamos a morder la mano?
Toño el remesero
Sabe don, yo estoy de acuerdo con eso de pegar las mordidas al viejo chele ese que nos dijo agujero de mierda, si, pero en la nuca. De ahí qué sentido tiene que salgan con que le mordemos la mano al que nos da de comer, eso da risa, porque nos truena de a galán y si queremos comer, tenemos que lavar desde platos hasta sanitarios sin renegar porque si no, nos hartamos ni mierda del agujero ese que dijo. Así que estamos peor de la cuenta porque todos los mojados, deportados, escondidos, con TPS y sin TPS, sufrimos para mandar los pobredólares y tenemos millonarios a los banqueros. ¿O no?