Tegucigalpa/AFP
El expresidente hondureño (2006-2009) Manuel Zelaya denunció este miércoles que un juzgado ordenó expropiarle la casa al fallar en favor de una demanda que interpuso una exministra suya por haberla separado del cargo.
Zelaya dijo en rueda de prensa que el juzgado civil dictó «un embargo precautorio de mi casa por haber separado una funcionaria que en ese caso no estaba cumpliendo su responsabilidad en mi gobierno».
La demanda por falta de pagos de derechos laborales fue interpuesta por la entonces presidenta del Banco Central, Gabriela Nuñez, contra su casa en la colonia Tres Caminos de Tegucigalpa, desde donde la madrugada del 28 de junio del 2009 Zelaya fue sacado por militares y enviado al exilio a Costa Rica en un golpe de Estado.
«Es primer precedente que se crea en este país» porque «es la primera vez que un expresidente paga las prestaciones de un funcionario que despidió», lamentó.
«Me están sacando la vivienda donde he vivido dos décadas. Primero me sacan a balazos (durante el golpe de Estado) y ahora me expropian la vivienda», denunció.
Según el portavoz de la Corte Suprema de Justicia, Melvin Duarte, Zelaya tiene derecho a un recurso judicial, pero el exgobernante aseguró que no hará uso del mismo.
La demanda es por unos 220.000 dólares.
En un ‘tuit’, Zelaya acusó al presidente Juan Orlando Hernández, pero no explicó las causas.
«No hay problema, señor juez, dicte la sentencia, no voy a apelar, que me quite la casa JOH (José Orlando Hernández) y la use con sus bonitos perros que tiene», escribió el Twitter.